miércoles, 26 de mayo de 2010

Presentación de Baroni: un viaje, de Sergio Chejfec

Publicado por Goizeder Lamariano Martín

Aunque no conocía a este autor ni ninguno de sus libros, el pasado lunes 24 de mayo acepté una invitación y acudí a la presentación en Madrid de Baroni: un viaje, el último libro del escritor argentino Sergio Chejfec. El acto tuvo lugar en la librería Eléctrico Ardor, situada en el número 62 de la calle Pelayo, y en él participaron la novelista Reina Roffé y el crítico literario Antonio Jiménez Morato.



Baroni es un personaje real. Baroni es un personaje de ficción. Esta novela demuestra que ambas fórmulas no se contradicen. El personaje real es Rafaela Baroni, una reconocida artista popular que vive en un pequeño pueblo de la precordillera venezolana. Allí se dedica a tallar figuras de madera casi siempre religiosas, a curar enfermos, a predecir desgracias, a morirse. Baroni se muere y resucita: dos veces al año interpreta su propia muerte. El personaje de ficción es un ser borroso y multifacético que se transfigura en recuerdo, paisaje, experiencia múltiple o comunidad.

Baroni: un viaje es el desarrollo de una mirada oscilante, que va de la protagonista al país donde habita, de las incógnitas de la religiosidad popular a las no menos misteriosas condiciones de la creación artística. Como en todos los libros de Sergio Chejfec, en Baroni: un viaje el pensamiento representado ocupa un lugar central en el desarrollo de la escritura. Y una vez más, sus dudas y disquisiciones, unido a los seres limítrofes que elige exhibir, son la marca de un estilo muy personal.

Sergio Chejfec nació en Buenos Aires en 1956. Entre 1990 y 2005 vivió en Caracas y desde entonces reside en Nueva York. Ha publicado las novelas: Lenta biografía (1990), Moral (1990), El aire (1992), Cinco (1996), El llamado de la especie (1999), Los planetas (1999), Boca de lobo (2000), Los incompletos (que contó con el apoyo de la beca Guggenheim, 2004), Baroni: un viaje (2007) y Mis dos mundos (Candaya, 2009). Es autor también de los libros de poemas: Tres poemas y una merced (2002) y Gallos y huesos (2003), y del libro de ensayos El punto vacilante (2005).

Durante la presentación, Sergio Chejfec destacó sobre Baroni: un viaje: “Para mí, lo atractivo de Rafaela Baroni es que es una artista autodidacta que, con una gran precariedad de medios y recursos, logra una gran elocuencia en sus artes, una importante sensibilidad artística. Nos indica cómo nos tenemos que sentir, nos interpela, pero en ella misma ese efecto es más conmocionante y con una gran escasez de complejidad. Hay una falta correlación entre el sock que provoca la orfandad técnica y la máxima conmoción. Siento que no podría renunciar fácilmente a la ilusión de conmover. El arte puede ser conmocionante aunque sea complejo. Aquí se nota la excesiva autoridad que tiene el narrador en todas las novelas y muy especialmente en esta. La novela quiere incorporar la dimensión de la larga duración que tienen las obras de arte, el carácter de permanencia, a la literatura”.

Por otra parte, Chejfec explicó sobre su relación inicial con la literatura: “Mi familia tiene orígenes polacos y judíos. La lengua yiddish fue para mí una lengua fantasma, una cortina, ya que nunca la pude hablar con mis hermanos. Además, tardé en hablar, lo hice a los cinco años y, por si fuera poco, en mi familia se leía muy poco. Por eso, para mí, la literatura fue un acto de la voluntad, yo decidí ser escritor. Por eso veo la narración como un discurso autogenerado, con diferentes versiones de lectura. Toda novela es como una lengua en miniatura, encapsulada, con sus propias reglas. Precisamente por ello, a la hora de escribir tuve que inventar una lengua que no traicionara mis orígenes titubeantes y que, al mismo tiempo, contara lo que yo quería expresar”.

                                    
Chejfec recordó asimismo sus vivencias como emigrante. “Mi familia es de Polonia y yo argentino, pero he vivido en Venezuela y ahora vivo en Nueva York. Por eso, mis personajes también son emigrantes, desplazados. No pertenecen a ningún sitio, siempre están fuera de lugar. Publiqué mi primera novela en 1990 y justo una semana después de que se publicara me fui a vivir a Caracas. Casi todo lo que he escrito lo escribí en Venezuela pero, curiosamente, lo publiqué en Argentina. Por eso me siento a mis anchas con personajes flotantes, discontinuos, que tienen una conciencia deambulatoria”.

Sobre la literatura que crea, el escritor argentino comentó: “Soy consciente de que mi literatura no es realista, no tiene referentes marcados. En mis obras incluyo viajes físicos, materiales, pero también viajes por paisajes globales, constantes, cuyos estímulos producen una decepción continua al intentar desentrañar el significado de lo que vivimos. Hago uso de una sensibilidad anacrónica y, al mismo tiempo, contemporánea”.

Otra cuestión recurrente en las novelas de Sergio Chejfec son los caminantes. “Mi literatura tiene que ver con los caminantes, pero no sólo la mía, toda la literatura moderna tiene como motivo muy básico el deambular. Por eso este tema es una matriz poco iluminadora para hablar de un escritor en concreto, ya que los personajes caminantes son una larga tradición literaria. En mi caso se combina el hambre con las ganas de comer, uno escribe lo que quiere, pero también lo que puede. No me sale escribir, representar, lo que está ocurriendo, prefiero lo discontinuo, lo que no se ve, el significado de las cosas. Para mí, el viaje es muy estimulante, se adapta a la sensibilidad contemporánea. Es un modelo que puedo llenar a mi manera”.

Chejfec habló también sobre su forma de entender la ficción. “Mis primeras novelas eran más de ficción, pero el resto ya no. Para mí la ficción es crear un narrador, una voz narrativa que controle todo lo que se dice. En Baroni: un viaje hay una operación de nostalgia, un reconocimiento y un agradecimiento a Venezuela, al país y a la gente que me había acogido. Baroni es real y ficcionada”.

Sobre su relación con la escritura, el escritor argentino confesó: “Creo que una novela siempre tiene una tensión genérica, un viaje disperso y oblicuo. La narrativa tiene que incorporar un discurso no narrativo, de las otras ciencias y saberes del mundo. Cuando me siento a escribir, avanzo a tientas, con cautela, como una suerte de indagación, un ejercicio de prueba y error. Por eso es una casualidad que la editorial Punto Sur quebrara justo antes de publicar Moral y que, por el contrario, Mis dos mundos tuviese un gran éxito de crítica. Los primeros libros siempre son fascinantes, porque se hacen con mucho trabajo y sin un presupuesto ni la necesidad de compararlos y de ver si son mejores y peores que otros libros del autor. Hay libertad para escribir sobre complejidad pero, al mismo tiempo, sin necesariamente escribir de forma compleja, gracias a la simplificación del lenguaje”.

Por último, Chejfec también se refirió a los objetos, presentes en muchas de sus obras. “Siempre hay objetos enigmáticos en mis novelas. Irradian una gran atracción y un gran poder enigmático. Son objetos como cartas, cuadros, sepulturas, obras de arte en general. Aquí se plantea la cuestión de quién mira a quién, si nosotros al objeto o el objeto a nosotros. Gracias al vínculo con los objetos se traman historias y narraciones. En mi literatura los objetos tienen una presencia ambigua, dicen muchas cosas, pero no dejan nada claro”.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola,

Muy chulo tu blog. La verdad es que me han entrado ganas de leer a ese Chejfec. A ver si lo encuentro en alguna biblioteca.

Goizeder Lamariano Martín dijo...

Hola,

Me alegro de que te haya gustado el blog. A mí también me entraron muchas ganas de leer y descubrir a Chejfec después de asistir a la presentación. Espero poder leer pronto alguna obra suya y, por supuesto, poder compartir la reseña del libro con todos vosotros.

Un saludo.

Alberto dijo...

Hola Goizeder,

te dejo aquí (porque no he encontrado un email donde contactarte) una idea novedosa que viene de Italia y que consiste en contratar un traductor al lenguaje de sordos, para las presentaciones de los libros. Lo está haciendo Sara Rattaro (a quien le reseñaste SI ESCUCHARAS MI CORAZÓN) para su nueva novela NON VOLARE VIA, que en una sola semana, ya está en el 10 de la clasificatoria de novela italiana.

Te dejo aquí el video de dicha presentación. Un fuerte abrazo.

vimeo.com/66510515



Goizeder Lamariano Martín dijo...

Alberto,

Muchas gracias por compartir con todos los seguidores y lectores de Cuéntate la vida esta iniciativa tan interesante para las presentaciones de libros, mi enhorabuena a Sara Rattaro. Un abrazo muy fuerte.

Publicar un comentario

Cuéntanos todo lo que te apetezca pero siempre con respeto y educación hacia los escritores, sus obras, la autora del blog y los demás comentaristas. ¡Muchas gracias por comentar!

 

Cuéntate la vida Template by Ipietoon Blogger Template | Gadget Review