domingo, 16 de diciembre de 2012

Fiebre en las gradas, de Nick Hornby

Publicado por Goizeder Lamariano Martín


Título: Fiebre en las gradas
Autor: Nick Hornby
Editorial: Ediciones B
Año de publicación: 1998
Páginas: 403
ISBN: 8440680260

Como muchos de vosotros ya sabéis Nick Hornby es uno de mis autores favoritos. Y este es ya el séptimo libro que leo de él después de Alta fidelidad, Cómo ser buenos, Todo por una chica, En picado, Juliet, desnuda y Un gran chico. Ahora solo me falta por leer 31 canciones, pero no creo que lo haga. Y precisamente Fiebre en las gradas es uno de los libros de Hornby que más ganas tenía de leer. Tenía puestas muchísimas expectativas en él, creía que me iba a encantar, estaba segura de que me iba a gustar muchísimo... Pero ahora sé que estaba equivocada. Os lo explico con más detalle. 

Pero lo que no sabía era que no es una novela, un libro de ficción, sino más bien un ensayo autobiográfico, una especie de diario en el que Hornby nos habla de su obsesión por el fútbol, su relación con este deporte y, especialmente, su fanatismo por el equipo de sus amores, el Arsenal.

Si estaba tan segura de que este libro me iba a gustar era porque ya conocía el estilo de Hornby y porque durante muchos años yo también fui una seguidora incondicional de Osasuna. Aunque en muchos momentos me he sentido muy identificada con lo que nos cuenta el autor, el libro no ha sido ni mucho menos lo que yo esperaba.

Creo que, en parte, porque yo creía que sería una novela, al igual que el resto de sus libros, y en parte también porque el libro es muy inglés. Hornby se extiende mucho en hablar de partidos, jugadores, entrenadores e incluso jugadas de la liga inglesa que al menos para mí son desconocidos, ajenos y precisamente por eso no he logrado meterme en el libro en ningún momento.

La obra está estructurada en una breve introducción y tres etapas: 1968-1975 (23 capítulos), 1976-1986 (29 capítulos) y 1986-1992 (23 capítulos). Si Hornby hubiese hablado de la actualidad de los equipos ingleses probablemente el libro me hubiese gustado un poco más, pero al hablar de hace varias décadas...

Lo que sí me ha gustado son las reflexiones que realiza el autor sobre algunos de los aspectos que rodean el fútbol en Inglaterra: los hooligans, la violencia, el racismo, el mal estado de los estadios que provocó varias catástrofes en las que murieron decenas de seguidores...

Y, cómo no, lo que más me ha gustado sin duda son los capítulos más personales, los más íntimos e intimistas, en los que Hornby recuerda el primer partido del Arsenal que vio en el estadio de Highbury junto a su padre, recién separado de su madre, el 14 de septiembre de 1968, nada más cumplir once años.

O cómo coleccionaba cromos de los jugadores, cómo tenía que soportar en el colegio, en el instituto e incluso en la universidad o en sus primeros trabajos las burlas de sus compañeros por ser seguidor del Arsenal, un equipo al que la mayoría odia, detesta y aborrece con todas sus fuerzas.

Hornby nos cuenta también sus visitas al emblemático estadio de Wembley para ver cómo una y otra vez el Arsenal pierde las finales que disputa, nos habla de la selección inglesa, del juego sucio y duro que se practica en Inglaterra, y recuerda su vida en Highbury, el campo del Arsenal, donde comenzó situándose en el Recinto de los Escolares, para luego pasar, a los quince años, al Fondo Norte, el graderío cubierto situado detrás de una de las porterías “y que alberga a los hinchas más voceras y más bestias del Arsenal”.

Con el paso de los años Hornby cambió el Fondo Norte por una localidad de pie en la Banda Oeste, para terminar comprando un abono de temporada en la misma grada, pero por fin en una localidad de asiento. Página a página Hornby crece, madura, cambia, pero lo que jamás cambia es su amor, su obsesión por el Arsenal, que incluso le lleva a acudir a un psicólogo o a comprar una casa en el barrio en el que está el estadio de Highbury.

Hornby nos cuenta todo esto entre orgulloso y avergonzado, sabiendo que habrá muchos lectores que no le entenderán, que no comprenderán cómo alguien puede ser tan aficionado durante tantos años al mismo equipo y, sobre todo, condicionar tanto sus relaciones, sus amistades, su familia o su trabajo por algo tan en apariencia superficial y banal como el fútbol.

Yo sí que le he entendido, me he sentido identificada con él, me he reído leyendo algunos de los capítulos del libro y, por encima de todo, he recordado mi propia infancia y juventud con emoción y añoranza. Como Hornby, también fui por primera vez a un campo de fútbol, el de Osasuna, el Sadar, porque para mí jamás será el Reyno de Navarra, con mi padre, cuando tenía 9 años y mis padres también estaban recién divorciados.

Y al igual que a él me impresionó tanto el ambiente, los cánticos, los ánimos, la emoción, el nerviosismo, el sufrimiento, la alegría desbordante e incontrolable que junto a mi padre, mis tíos y mis primos volví al estadio cada dos semanas durante toda la temporada, hasta que al año siguiente mi padre me hizo socia de Osasuna. Y fui socia durante 15 años, desde los 10 y hasta los 25, cuando me vine a vivir a Madrid.

Como Hornby, entre orgullosa y pudorosa tengo que confesar que yo también he dejado de asistir a celebraciones familiares o con amigos con tal de no perderme un partido de Osasuna en el Sadar. He acompañado al equipo de mis amores cuando estaba en Segunda División a Gijón, a Leganés, a Eibar, a Vitoria. Lloré de alegría el 4 de junio de 2000 cuando gracias a un gol de Treziack le ganamos 2-1 al Recreativo de Huelva y volvimos a Primera División después de seis temporadas.

Después de años de ser uno de los equipos mediocres, de no poder lucir nuestros colores, por fin pude, con muchísimo orgullo, pasear la camiseta y la bufanda rojillas con una indescriptible alegría y satisfacción cuando en 2005 jugamos la primera final de Copa del Rey contra el Betis en el Vicente Calderón. Yo no pude viajar a Madrid, pero desde la Plaza del Castillo de Pamplona, en una pantalla gigante, vi cómo Osasuna perdía su primera final y no pude evitar llorar amargamente.

Esa temporada, la 2004-2005, fue la mejor de Osasuna en toda su historia y cómo no, la disfruté como una enana. Nos clasificamos para la previa de la Champions y jugamos la Uefa, incluso llegamos a la semifinal. Yo ya estaba preparando el viaje a la final de Glasgow, pero no pudo ser.

Aun así tuve la suerte de viajar a Burdeos un 14 de febrero, miércoles. No me importó sacrificar un día de fiesta. Como tampoco me importó viajar en tan solo dos días de Punta Cana a Madrid, de Madrid a Pamplona, de Pamplona a Sevilla y de Sevilla a Pamplona con tal de ver el partido de vuelta de la semifinal de Uefa en la que el Sevilla nos eliminó. Y tampoco me importa ahora decir que, una vez más, volví a llorar.

Durante los 15 años que fui socia de Osasuna para mí el fútbol fue algo muy importante, imprescindible. No me importaba gastarme la paga en las entradas para los partidos o congelarme en las gradas del Sadar mientras veía cómo Osasuna perdía. O que mi regalo de cumpleaños o Navidad fuese el carné de socia o el viaje para ver un partido de los rojillos fuera de casa. Porque para mí, durante muchos años, la vida se contaba por temporadas.

Porque, al igual que Hornby, también le tengo que agradecer a mi padre que me haya transmitido su afición por el fútbol y, sobre todo, su pasión por Osasuna. Porque, como el autor, yo también sueño con poder llevar algún día a mis hijos al Sadar. Porque, me guste o no, soy rojilla y lo seguiré siendo siempre. Hasta la médula.  

Si te interesa el libro puedes encontrarlo aquí

32 comentarios:

CuEnTaLiBrOs dijo...

Una reseña muy "personal" :) No conocía al autor pero por lo que cuentas está entre tus preferidos, tendré que buscar más. Nunca he sido muy futbolera pero sí que me gusta el deporte. Besos

Shorby dijo...

Tengo pendiente al autor desde hace mil años...
Creo que ya es hora =)

Besotes

Enzo dijo...

No he leido nada de este autor y con lo que me gusta a mi el fútbol, creo que no va a ser este el primero que lea. Pero sabiendo que es un autor que te ha gustado tanto, algo bueno tiene que tener y me servirá para el reto.
Una buena reseña.
Besos.

Goizeder Lamariano Martín dijo...

Marilú Cuentalibros,

Es cierto que es una reseña muy personal, me apetecía escribirla así, aunque normalmente no suelo hablar de mis vivencias en las reseñas pero esta vez me lo pedía el cuerpo, jeje. Sin duda te recomiendo a este autor, aunque no este libro, pero por suerte tienes otros muchos para elegir y estrenarte con él. Muchos besos.

Goizeder Lamariano Martín dijo...

Shorby,

Sí, ya es hora, tienes que leer a Nick Hornby, es uno de mis autores favoritos, uno de los que más recomiendo y regalo. Espero que en 2013 te estrenes con él. Muchos besos.

Goizeder Lamariano Martín dijo...

Enzo,

Desde luego, si no te gusta el fútbol, no leas este libro, pero tienes otros muchos del autor para descubrir a Hornby. Me alegro de que te haya gustado la reseña. Muchos besos.

Al calor de los libros dijo...

Aunque este libro no haya sido lo que esperabas, pero te ha servido para rememorar unos momentos importantes en tu vida.
Sigo con ganas de leer "Alta fidelidad".
Un abrazo

Goizeder Lamariano Martín dijo...

Blanca,

Tienes razón, siempre se pueden sacar cosas positivas de libros que no han sido lo que esperábamos y con este he tenido muchos y muy buenos recuerdos. Espero que pronto puedas leer y disfrutar Alta fidelidad. Otro abrazo muy fuerte para ti.

María dijo...

Es un autor al que tengo muchas ganas de descubrir. Yo que soy futbolera entiendo perfectamente lo que sientes por tu equipo aunque no sea el mismo que el mío ejem, ejem... Una pena que por la distancia con Inglaterra no te hayas metido tanto en la historia. Espero que sigas disfrutando de las historias del autor :)
¡Muchos besos!

samarkanda dijo...

Tal vez no haya cumplido las expectativas que tenías puestas en este libro pero te ha hecho disfrutar en otro sentido, recordando los momentos que has vivido.
No he leído nada de este autor y no creo que me anime con este título porque el futbol me gusta pero hasta cierto punto.
Musus.

Goizeder Lamariano Martín dijo...

María,

Espero que en el nuevo año puedas descubrir a Nick Hornby, si te gusta, tienes muchos libros suyos para disfrutar. Bueno, bueno, mejor no hablar de equipos, jajaja. Muchos besos.

Goizeder Lamariano Martín dijo...

Mafaldas,

Es cierto que me ha hecho recordar aunque no era lo que esperaba, siempre hay cosas buenas en todos los libros, nos gusten o no. Aunque no leas este libro, te recomiendo que leas alguno de los otros de Hornby. Musus.

Margari dijo...

Como ya han dicho, no ha cumplido tus expectativas este libro, pero sí que lo has disfrutado, aunque de otra manera. Yo aún tengo pendiente descubrir a este autor, pero no será con este libro, que el fútbol y yo...
Besotes!!!

Goizeder Lamariano Martín dijo...

Margari,

Espero que pronto puedas descubrir a este autor y disfrutes mucho con sus muchos libros, tienes para elegir, ya nos contarás por cuál te decides. Muchos besos.

Carol dijo...

Tengo todos sus libros en digital, a ver si me animo y me pongo a ello, porque todavía no he leído ninguno, pero la película de "Alta fidelidad" me gustó mucho.

¡Besos!

Goizeder Lamariano Martín dijo...

Carol,

Si ya tienes todos sus libros no tienes excusa para no darle una oportunidad al autor, seguro que te gusta, ya nos contarás. A mí la película Alta fidelidad no me gustó, ni siquiera fui capaz de terminarla, pero el libro me encantó y es de los que más recomiendo y regalo. Muchos besos.

Tatty dijo...

No he leído nada de este autor y tengo ganas de probar con alguno de sus libros pero este creo que no estará entre los candidatos ya que el tema del futbol no me atrae nada
besos

Goizeder Lamariano Martín dijo...

Tatty,

Espero que pronto puedas leer y disfrutar alguno de los libros de este autor, si no te gusta el fútbol, desde luego no te recomiendo Fiebre en las gradas, pero sí cualquiera de los otros libros de Hornby. Muchos besos.

Meg dijo...

Pese a tu reseña, creo que este título no me llegaría, y para estrenarme con el autor quizás no sea el más apropiado. Un besote!!

Goizeder Lamariano Martín dijo...

Meg,

Como cuento en la reseña, de los siete libros que he leído de Nick Hornby este es sin duda el que menos me ha gustado y, por tanto, el que menos recomiendo. Pero este autor sigue siendo uno de mis favoritos y recomiendo a todo el mundo que lea el resto de sus obras. Muchos besos.

Narayani dijo...

Ufff, es que yo no soy nada futbolera... Creo que este libro no me iba a gustar mucho. Lo dejo pasar.

Qué pena que no te haya gustado si el autor te gusta y el tema que trata también... No siempre se puede acertar.

Besos!

Carol dijo...

Pues en ese caso, si la película me gustó, seguro que el libro me encanta. A ver si me pongo a ello pronto. ¡Besos!

Dolores dijo...

Comparto contigo la afición al fútbol, y me he sentido identificada con todas las sensaciones que cuentas. Para mi también fue especial el día que vi un partido de primera división, por primera vez. Y sueño con el día en que pueda llevar a mis hijos. Y aunque cuentas que el libro no era lo que esperabas, a mi me ha llamado la atención y seguramente lo lea.

Una reseña distinta, me ha encantado. Un beso.

Goizeder Lamariano Martín dijo...

Carol,

Sí, seguro que Alta fidelidad te gusta mucho, fue el primer libro del autor que leí y me encantó su estilo. Ya nos contarás qué te parece. Muchos besos.

Goizeder Lamariano Martín dijo...

Narayani,

Si no te gusta el fútbol, dudo mucho que este libro pueda gustarte. Esperaba que me gustase mucho por el autor y por el tema, pero al no ser ficción, que no me lo esperaba, no me gustó tanto pero es cierto, no siempre se acierta. Muchos besos.

Goizeder Lamariano Martín dijo...

Dolores,

Si te gusta el fútbol el libro te gustará. Espero que si al final te animas a leer el libro te guste, ya nos contarás. Qué bien que te haya gustado tanto la reseña, me alegro mucho. Muchos besos.

Marga Ramon dijo...

Esta lectura te ha llevado a recordar grandes momentos. Todavía no he leído nada de este autor, pero no creo que me estrene con este libro a pesar de que me gusta el fútbol.
Besos

Carol dijo...

Me tengo que animar con este autor que es verdad que siempre nos hablas muy bien de él y yo aún no lo conozco. Un beso

Goizeder Lamariano Martín dijo...

Margaramon,

Aunque no sea con este libro, tienes que estrenarte con Nick Hornby, merece mucho la pena. Es cierto que no era lo que me esperaba pero la lectura me ha ayudado a recordar muy buenos momentos. Muchos besos.

Goizeder Lamariano Martín dijo...

Carol,

Sí, en 2013 tienes que leer algo de Nick Hornby, hazme caso, jeje, que vale mucho la pena este autor y sus historias. Muchos besos.

aureavicenta dijo...

Otro descubrimiento, Goizeder, muchas gracias.
No sn temas para mí, amiga, pero es estupendo andar al compás de la realidad literaria con las críticas y aportaciones en tu blog.
Un gran saludo y feliz fin de semana.

Goizeder Lamariano Martín dijo...

Aureavicenta,

Este libro de Hornby es el que menos recomiendo para descubrir al autor, no es ficción y te tiene que gustar el fútbol. Te recomiendo cualquiera de los otros libros del autor que he leído: Alta fidelidad, Todo por una chica, Cómo ser buenos, Juliet desnuda, Un gran chico y En picado. Muchos besos y feliz fin de semana.

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