Hoy es lunes. Volvemos a enfrentarnos a la resaca del sábado y del domingo y al comienzo de una nueva semana. Y para haceros este día más llevadero, como cada lunes os traigo una nueva entrega de la sección Periodismo para reír... o para llorar, en este caso ya es la quinta.
Como véis, después de la hernia fiscal de la semana pasada hoy la cosa sigue relacionada con informes médicos. En este caso el periodista ha demostrado ser un poco disléxico y no tener muy clara la diferencia entre derecha e izquierda, grande y pequeño y pie y dedo... Parece que él y sus jefes se perdieron varios capítulos de Barrio Sésamo. Pero no todo es negativo, podía haber sido mucho peor, menos mal que la fractura se la hizo en el pie pequeño, que si llega a ser en el pie grande seguro que le habría dolido mucho más...
Abrazos periodísticos para todos.
18 comentarios:
jejeje cambió las palabras, pobre. Pero por lo menos no puso faltas de ortografía; hay que reconocer que tuvo mérito!! jeje (comparado con los otros que nos has puesto, por lo menos...)
Isi,
Sí, en este caso sólo ha sido un cambio de palabras, no es tan grave como las cuatro entregas anteriores, así que a este periodista no le echaremos tanto la bronca, jejeje. Muchos besos.
jajajaj Goizeder, recuerdo qeu cuando yo escribia bajo presión, porque hay plazos de entrega y sobre todo hay un espacio asignado que unas veces te sobra y otras te falta, tambien me pasaban cosas incomprensibles, la mente iba más rapida que la manoy al final pasaban cosas de este estilo, si tienes tiempo para repasar la crónica pues te das cuenta y rectificas, pero si como suele pasar vas con la hora pegada, resulta que te haces daño en dedo en el dedo derecho de pie pequeño, no se como llevara el jugador eso de tener un pie grande y uno pequeño, debe ser una tortura, mas que nada por lo del equilibrio
Carmina,
Tienes toda la razón, yo también he trabajado cinco años en la redacción de un periódico con mucha presión, prisa por entregar cada día la página, ajustarte al espacio y todas esas cosas y es verdad que cuando vas muy justo de tiempo y entran los agobios y las prisas al final no sabes ni lo que estás escribiendo. Y si encima el redactor jefe, el jefe de sección y el encargado de cierre tampoco están muy atentos, pues pasan cosas como estas. Habría que preguntarle al jugador que tál se las apaña con un pie pequeño y uno grande, jejeje. Muchos besos!
jejejejejeje, bueno es que el hombre no estaba pensando en lo que tenía que pensar y claro....
besos
Jajaja. La verdad que cada día nos sorprendes más con esta sección. Es genial para empezar el lunes con pie derecho, digo pequeño, bueno como sea :)-
Muchos besos!!
Sonia,
Pues sí, estas cosas pasan cuando se tiene la cabeza en otra parte, el periodista me da pena, el pobre deportista también, pero nos hacen pasar muy buen rato, jeje. Besos.
María,
Espero que hayas empezado muy bien el lunes y la semana, además es puente, me da igual si con el pie derecho, el grande, el pequeño o el que quieras, mientras te hayas reído, jejeje. Muchos besos guapa!
Yo creo que en este caso pudiera tener la culpa "el internet", porque claro, como se hacen los artículos en ficheros para mandarlos por "el internet" a la redacción, pues pasa lo que pasa. Igual inicialmente puso "en el pie derecho en el dedo pequeño", luego pensó que no le gustaba mucho cómo quedaba la sintaxis, la cambió sin fijarse mucho en los adjetivos, y claro, pasa lo que pasa. Muy ameno esta sección.
Besos
Icíar,
Me alegro mucho de que te guste la sección y te resulta amena. No sé si la culpa será de Internet o no. Yo creo que simplemente es un despiste y ya está. Ese error se puede cometer mandando el artículo por Internet o, como ocurre la mayoría de las veces, escribiéndolo en la redacción. Muchos besos.
Jajaja, pobre periodista, si es que las prisas no son buenas aunque igual el jugador en cuestión tiene un pie más grande que otro, vete a saber.
Musus.
Mafaldas,
Cómo me he reído con tu comentario! No se me había ocurrido pensar que el jugador podía tener un pie más grande que el otro, aunque nunca se sabe, jejeje. Muxus!
Pobre, un despistillo simpático en este caso. Esto me parece menos grave y me enfada muuucho menos que las faltas de ortografía; con ésas ... no hay piedad!!
Un beso,
Hoy llego tarde, pero que conste que lo primero que hice esta mañana fue leer tu entrada, pero tenía cita médica y no pude pararme a comentar. Me he reído mucho con lo de que se perdieron algún capítulo de Barrio Sésamo. Mi heroe era "Coco" ¡ja,ja!
En fin! Pobres periodistas! Seguro que luego hay una sección en el periódico del día siguiente con su correspondiente "Fe de erratas" y mil disculpas.
Carmen,
Cómo me he reído con lo de no hay piedad, jejeje parecemos las cazadoras de las faltas de ortografía o algo así, jejeje. Pero tienes razón, esto es un despiste, que también nos hace pasar un buen rato, pero las faltas de ortografía son más graves y más imperdonables, jeje. Muchos besos!
Bookworm,
No pasa nada mujer, tranquila, que no tienes que disculparte, faltaría más. Espero que la visita al médico haya ido muy bien y que no sea nada importante! Jajaja a mí de pequeña también me encantaba Barrio Sésamo pero mi favorito no era Coco sino Don Pim Pón, jejeje. Lo de la fe de erratas y las disculpas a mí ya me ha tocado alguna vez tener que escribir una rectificación al día siguiente, son gajes del oficio, jeje. Un besazo muy fuerte!
¡que risa! seguro que duele lo mismo una fractura sea en el pie grande, el pequeño o la mano gigante
un beso,
Ale.
Ale,
Qué bien que te haya divertido tanto! Yo sí que me he reído con tu comentario, tienes razón, una fractura tiene que doler mucho de todas formas, jejeje. Muchos besos guapa!
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