Perdida entre Marcapáginas

¡Hola! Hacía casi medio año que no me pasaba por aquí. Espero que todos estéis bien de salud, laboralmente y llevando esta situación lo mejor que se pueda. Yo no me quejo, los cuatro estamos muy bien en todos los aspectos, espero que sigamos así. Hoy no os traigo una reseña sino una entrada para explicaros por qué he estado desaparecida desde junio. 

Como muchos ya sabéis por mis redes sociales, después de tres meses y medio de ERTE y de trabajar tres días en julio, el 3 de julio me quedé en paro. Aproveché el verano para disfrutar con los peques, para recuperar el tiempo que habíamos estado sin vernos durante el confinamiento con los amigos y sobre todo con la familia y para pensar qué quería hacer con mi vida a partir de ahora. 

Debido a que este es un curso escolar distinto, aquí en Navarra con jornada continua, y que los peques cada dos por tres van a estar confinados en casa cada vez que haya un positivo en sus clases (por ahora solo nos ha tocado una vez con el mayor, esperemos que siga la cosa así de bien), me planteé retomar mi trabajo como correctora de textos que ya había desempeñado en Madrid desde 2011 y aquí en Pamplona de forma más esporádica, para poder trabajar desde casa y poder conciliar. 

A finales de agosto creé unos perfiles en redes sociales, una pequeña página web y el 23 de agosto recibí la llamada de Fátima Frutos, la presidenta de la Asociación Navarra de Escritores, comentándome la necesidad que hay aquí de una agencia literaria. 

Durante un par de días le di vueltas al asunto y al final me he lanzado a la piscina, espero que tenga agua, y he creado Marcapáginas, la primera agencia literaria de Navarra. Para mi sorpresa en estos casi tres meses he tenido muchísimos encargos de los diferentes servicios que ofrezco y han sido muchos más de los que me imaginaba los escritores de Navarra, País Vasco, Cantabria o Cataluña los que se han puesto en contacto conmigo. 

Para mí esto es un sueño. Poder trabajar junto a escritores, editores, lectores, libreros o periodistas. Poder vivir de algo que me apasiona desde pequeña es un lujo, un privilegio que me hace sentir, y más con la que está cayendo, una afortunada. 

Para que os hagáis una idea de en qué consiste la labor de una agente literaria os dejo dos entrevistas que me han hecho en las últimas semanas en Diario de Navarra y en Navarra Capital. 

Y recién salida del horno, que la estrenamos ayer mismo, la página web de Marcapáginas. Espero que os guste. 

Cuidaros mucho.